Neymar Junior se ha erigido como héroe de su selección en la victoria de la ‘canarinha’ ante México (2-0). Al fin. Y no porque antes no hubiese querido, sino porque no había podido. Parecía un acto de gafe, de mala suerte. El delantero del PSG llegaba a Rusia después del Mundial de Brasil donde se lesionó en cuartos y no pudo jugar más. Cuatro años después era el tobillo lo que tenía renqueante al ‘10’ brasileño.
Así se presentaba la cita mundialista para él. Tras un debut en el que se le vio incómodo del pie derecho y se llevó las críticas de su país, Neymar renació. Marcó ante Costa Rica el 2-0 e hizo, con ayuda de Coutinho, respirar a una selección que se quitaría la losa de favorita para aprender a sufrir.
Y así llegaban los octavos para el atacante, frente a México, recuperado de cualquier dolencia y ante la primera cita que no dejaba margen de error. Con o sin dolor, debía aparecer. Y lo hizo. Marcó el primer tanto del partido en la segunda parte y regaló la sentencia a Firmino. Brasil volaba a cuartos con un Neymar, por fin, imperial. La estrella de la pentacampeona ha anotado 57 goles con Brasil y se queda a veinte de los 77 de Pelé.
Máximos goleadores en la historia de la selección brasileña:
— Pedro Martin (@pedritonumeros) 2 de julio de 2018
77 Pele
62 Ronaldo
57 Neymar
55 Romário
Eso es lo de menos. Porque este ya es un Mundial sin Messi ni Cristiano. Un certamen que está presenciando lo que, de seguir así, puede ser el aire fresco que necesita el fútbol y, porque no, el balón de oro.
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